Montón de luna y tacuara
formó tu cauce llorando,
Santa Lucía, cantando
vas entre sierra y llanura.
Tu voz es voz de un silencio
lastimado por zorzales,
llanto de cañaverales,
silbo de pájaros indios,
recuerdo de un sol que muere
entre ceibos y sauzales.
Naciste de un rastro seco,
sediento estabas de cauce
y el Arequita patriarca,
te hizo correr entre sauces.
Andando siempre sediento
del río grande y lejano
que espera tras de los montes
tu verde llanto serrano.
Montón de luna y tacuara
formó tu cauce llorando,
Santa Lucía, cantando,
vas entre sierra y llanura.
Tu voz es voz de un silencio,
lastimado por zorzales,
llanto de cañaverales,
silbo de pájaros indios,
lamento de piedras muertas
que se quiebran sollozando.
Montón de luna y tacuara
formó tu cauce llorando
indio río de azul copla,
agua dulce de ir cantando,
Santa Lucía cantando.
